La próstata es un órgano esencial del aparato reproductor masculino que puede cambiar de tamaño con la edad. Su crecimiento excesivo puede provocar molestias urinarias y afectar significativamente la calidad de vida.
¿Qué es la próstata y dónde se encuentra?
La próstata es una glándula pequeña, exclusiva del cuerpo masculino, que forma parte del sistema urogenital. Tiene el tamaño aproximado de una nuez o una castaña y está ubicada en la pelvis, justo debajo de la vejiga urinaria y por delante del recto. Su principal función es la producción de un líquido que forma parte del semen, el llamado líquido prostático, fundamental para la movilidad y supervivencia de los espermatozoides.
Además, la próstata rodea la uretra, el conducto por donde pasa la orina y el semen al exterior. Esta posición anatómica hace que cualquier aumento de tamaño de la próstata pueda ejercer presión sobre la uretra y causar problemas al orinar.
¿Cuál es el tamaño normal de la próstata?
En condiciones normales, la próstata tiene un volumen de entre 20 y 25 gramos y unas dimensiones aproximadas de 4 x 3 x 2,5 cm. A esta medida se le considera el tamaño normal de la próstata en adultos jóvenes y sanos. Sin embargo, a partir de los 30 años, la próstata comienza un crecimiento lento y progresivo que se acelera con la edad.
El crecimiento prostático puede llegar a un 1,6% anual, lo cual es considerado fisiológico. No obstante, en muchos hombres, este crecimiento se transforma en una hiperplasia benigna de próstata (HBP), una condición frecuente a partir de los 50 años.
¿Por qué crece la próstata con la edad?
El crecimiento de la próstata se relaciona principalmente con factores hormonales. Con el paso del tiempo, disminuyen los niveles de testosterona (hormona masculina) y aumentan los estrógenos, lo que estimula el agrandamiento del tejido prostático. Aunque este proceso es natural, no todos los hombres desarrollan síntomas o complicaciones.
Según datos de la Sociedad Española de Urología (AEU), cerca del 50% de los hombres mayores de 50 años presentan síntomas asociados a la hiperplasia benigna de próstata.
¿Para qué sirve la próstata?
La función principal de la próstata es producir y liberar el líquido prostático, una sustancia que protege y da movilidad a los espermatozoides. Este líquido se mezcla con el contenido de las vesículas seminales y se expulsa durante la eyaculación. Además, el músculo prostático ayuda a expulsar el semen de forma eficiente.
En definitiva, la próstata es clave tanto para la fertilidad masculina como para el correcto funcionamiento del sistema urinario.
¿Qué es la hiperplasia benigna de próstata?
La hiperplasia benigna de próstata (HBP) es una condición común en hombres mayores que consiste en el agrandamiento no canceroso de la próstata. Aunque no se trata de un tumor maligno, puede causar síntomas urinarios importantes al obstruir parcial o completamente el paso de la orina por la uretra.
Los síntomas que indican que tu próstata tiene algún problema son:
- Necesidad frecuente de orinar, especialmente por la noche (nicturia)
- Flujo urinario débil o intermitente
- Sensación de vaciado incompleto de la vejiga
- Dificultad para comenzar a orinar
- Urgencia urinaria
- En casos graves, incontinencia urinaria
Si quieres ampliar más información consulta nuestro artículo sobre cómo detectar la próstata inflamada.
Cirugía de próstata: una solución efectiva
Cuando los síntomas afectan seriamente la calidad de vida, el urólogo puede recomendar una intervención quirúrgica. Los tipos de cirugía de próstata más comunes y efectivas incluyen:
- Resección transuretral de próstata (RTUP): consiste en eliminar el exceso de tejido prostático mediante una herramienta introducida por la uretra. Es un procedimiento habitual, aunque puede tener efectos secundarios.
- Cirugía de próstata con láser verde: técnica mínimamente invasiva que vaporiza el tejido prostático sobrante con precisión. Una de las ventajas de la operación de próstata con láser verde es que permite una recuperación rápida y menos complicaciones.
- Urolift: es un método novedoso en el que se colocan implantes que retraen el tejido prostático para descomprimir la uretra, sin eliminar tejido. Es una opción interesante para hombres que quieren preservar la función sexual y eyaculatoria.
Revisión anual: la clave para prevenir problemas
Realizar una revisión urológica anual es fundamental para detectar a tiempo cualquier alteración en la próstata, especialmente si se tienen más de 45 o 50 años.
En casos más graves, la cirugía de próstata es una solución efectiva para tratar problemas como la hiperplasia benigna de próstata y el cáncer de próstata. Si buscas alternativas a la sanidad pública o quieres evitar largas listas de espera, en ClinicPoint te ofrecemos acceso a especialistas en urología y tratamientos médicos a precios accesibles. Consulta nuestras opciones y recibe atención de calidad sin esperas innecesarias.